… Mexicanos son más participativos gracias a la llegada de la izquierda en 2018.
… Se gobierna escuchando e involucrando a las comunidades en proyectos de gran envergadura.
… La colaboración entre gobierno, sociedad y sector privado es clave en el éxito del desarrollo social y económico de México.
… El Congreso de la Unión ofrece apoyo incondicional para cambiar leyes en favor de la población.
El Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030 es un instrumento de planeación democrática en el que el eje de gobernanza con justicia y participación ciudadana “es la apuesta por un México más justo, inclusivo, participativo y libre; a eso vamos hacia la libertad y estamos caminando”, destacó la gobernadora Layda Sansores San Román al inaugurar el penúltimo de los foros convocados por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para su conformación.
Acompañada del subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación (Segob), César Alejandro Yáñez Centeno Cabrera, quien asistió con la representación de la titular Rosa Icela Rodríguez Velázquez, y de la presidenta de la Comisión de Gobernación de la Cámara de Senadores, senadora Lilia Margarita Valdez Martínez, la mandataria pronunció un emotivo discurso previo a la inauguración oficial de este ejercicio iniciado desde el pasado seis de enero y que concluye mañana domingo 19.
Sansores destacó que gobernar es decir “y lo tenemos que hacer juntos, en el pueblo la esperanza, en nosotros el compromiso; y primero los pobres, las mujeres, nuestros pueblos indígenas, las comunidades afroamericanas; primero es el pueblo y primero es la patria, y juntos vamos”.
Recordó que México vivía gobernabilidad, pero no gobernanza. “Había mucha concordia, pero bien que sufrimos el golpe de la macana, los manguerazos, los toques eléctricos en los testículos y la desaparición de varios de nuestros compañeros. Este fue un dolor que aún nos queda como una marca”.
En el Centro de Convenciones de Campeche, ante cientos de ciudadanos, alcaldes, legisladores locales, funcionarios de los tres niveles, empresarios, integrantes de la sociedad civil, y de los titulares de los Poderes Legislativo y Judicial; de la secretaria de Gobierno, Elisa Hernández Romero; de la presidenta del DIF Estatal Campeche, Laura Sansores, y de líderes religiosos como el obispo de Campeche, monseñor Francisco González González, rememoró que se firmaron acuerdos “y me tocó siendo legisladora participar en la selección de ministros y es una anécdota de cómo se llevaba la gobernanza, que es esta distinta forma de gobernar. Elegíamos ministros de la Suprema Corte, diferentes puestos, pero todo era protocolo dirigido. Los legisladores caíamos en ese juego y poco se protestaba, ya era parte de esa historia”.
De ahí la urgencia de reformar al Poder Judicial, porque en ese entonces todos los que quedaron llevan la cruz de su parroquia; eso no pueden negarlo, y tienen que obedecer a quien los puso, quedan esos lazos de obediencia que son para siempre, son frutos del dedazo, del dedo flamígero y de los machuchones de la política en turno.
Todas las elecciones que viví puedo decirles que eran mentiras no piadosas, sino despiadadas porque te marcan, y así nos pudimos haber seguido como pueblo si no llega realmente este cambio que tanto anhelamos todos.
La mandataria estatal explicó que una cosa es gobernabilidad y otra cosa es gobernanza. “Había gobernabilidad entonces, porque la gobernabilidad es esta capacidad de ejercer el control, de mantener el orden, lo había, el PRI era excelente para eso, pero la gobernanza es la forma en que se gobiernan los actores involucrados y los mecanismos que se utilizan, esa es la diferencia”.
Por eso hoy estamos hablando ya no de gobernabilidad, antes ni se hablaba de gobernanza, porque era dictatorial, pero nosotros ni cuenta nos dábamos, era lo peor, así lo asimilamos, son elementos claves: la gobernanza, la participación, la transparencia, la rendición de cuentas, la equidad, el estado de derecho, y durante el gobierno de nuestro gran líder Andrés Manuel López Obrador, empezó a construirse esta gobernanza democrática.
Puso un ejemplo: mientras se estuvo construyendo el Tren Maya, todas las comunidades por las que atravesó hicieron asambleas participativas, en donde si se le hubiese llevado a la gente la obra y le dices que aquí le vamos a hacer una iglesita o un camino, hubiesen quedado satisfechos porque fueron tomados en cuenta; no, fue necesario hacer la asamblea, elegir quiénes iban a ser los responsables, quiénes los que llevarían la supervisión, la auditoría de que se hicieran bien las cosas, esa es la diferencia cuando hay realmente participación ciudadana. Absolutamente en todas se hicieron estas asambleas democráticas. Esto es lo que marca la diferencia.
Hoy nuestra presidenta Claudia Sheinbaum, Ki’ichpam ko’olel, mujer bonita, hermosa, la primera presidenta mujer de México, me llega al alma. Ese es un orgullo para todas las mujeres y también para todos los hombres porque el grado de democracia de un país se mide por el grado de participación de sus mujeres y cuántos nos estarán envidiando; siempre creí que los Estados Unidos tendría la primera mujer presidenta, pero se quedaron atrás, y eso es un orgullo.
DEMOCRACIA CON JUSTICIA Y PARTICIPACIÓN DEL PUEBLO
Sansores resaltó que lo mejor es que la presidenta hoy nos alienta a consolidar la democracia con justicia. “Ella está muy preocupada en que haya cada vez más participación ciudadana en todos los aspectos de la vida nacional, y serán muy fructíferos los resultados de estas mesas de trabajo”.