La denominada “viruela del mono” o “viruela símica” ha hecho sonar las alarmas en Europa y Estados Unidos.
La viruela del mono, endémica en África Central y Occidental, es una infección rara pero peligrosa similar al virus de la viruela ahora erradicado. Por lo general, se contrae de un roedor o un mamífero pequeño y no se transmite fácilmente de una persona a otra. Sin embargo, el virus de la viruela del mono se puede propagar a través del contacto con fluidos corporales, llagas de la viruela del mono o artículos como ropa y ropa de cama que han sido contaminados con el virus. También se puede propagar de persona a persona a través de gotitas respiratorias, generalmente en un entorno cerrado, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés).
¿Cuáles son sus síntomas?
La viruela del mono suele tener una sintomatología más leve que la de la viruela. Según los CDC, la enfermedad comienza con fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, dolor de espalda, escalofríos, inflamación de los ganglios linfáticos —un síntoma que no tiene la viruela— y agotamiento. Hasta tres días después de tener fiebre, puedes desarrollar un sarpullido en la cara y el cuerpo que evoluciona hasta lesiones en la piel como costras.
El periodo de incubación —es decir, el tiempo desde que la persona se infecta hasta que tiene síntomas— de la viruela del mono suele ser de 7 a 14 días, pero puede oscilar entre 5 y 21 días, informan los CDC. La enfermedad suele durar entre 2 y 4 semanas.
Las personas que pueden tener síntomas de viruela del mono, y aquellas que tienen contacto cercano con ellas, deben comunicarse con su médico si tienen erupciones o lesiones inusuales, indican los CDC.
“La infección se puede propagar cuando alguien está en contacto cercano con una persona infectada; sin embargo, existe un riesgo muy bajo de transmisión a la población en general”, se lee en un comunicado de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA, por sus siglas en inglés).
Fuente: CNN